La oficina en casa perfecta es un lugar de productividad, paz y relajación. Pero puede ser difícil encontrar el tiempo o el espacio en nuestras vidas modernas para un área así, especialmente con las distracciones o eventos que suceden en el hogar.
Con la inestabilidad de la economía actual, la mayoría de la gente está trasladando sus oficinas a casa. Por suerte, se explicarán 3 ideas que no fallan para crear una oficina en casa.
Buscar un espacio idóneo para trabajar en casa:
Lo ideal sería colocar tu entorno de trabajo en una habitación separada, a ser posible en un lugar alejado de las zonas comunes y las habitaciones de los niños. Además, debe poseer un espacio que de versatilidad, comodidad y funcionalidad donde puedas desarrollar tus labores de forma óptima.
En este caso, se aconseja reservar un lugar para tu ordenador y la impresora, así como estanterías con archivos, libros y otros objetos que puedan potenciar la distribución de la oficina.
Recuerda adaptar la oficina a sus circunstancias y las necesidades de la familia a lo que mejor funcione para todos.

Crea un ambiente de teletrabajo armónico:
Un lugar donde puedas cumplir tus objetivos debe ser un entorno tranquilo e inspirador. Intenta elegir colores que te motiven con su luminosidad o que sean neutros para potenciar la concentración, evita colores neón, mezclas de colores o diseños de estampados muy cargados que podrían distraerte en pleno trabajo.
Es importante que la combinación de colores de tu oficina sea similar a la de otros muebles, accesorios y elementos. También, puede incluir toques personales como carteles motivacionales, tus plantas favoritas, tu rincón de Feng Shui para relajarte y con esto mejorarás la productividad y concentración.
Buena iluminación y la ergonomía es la clave:
La oficina debe estar cerca de una ventana que deje pasar la luz natural, o al menos tener una buena iluminación artificial. Esto ayudará a no forzar la vista y a evitar los reflejos en las pantallas. Así evitarás afecciones visuales y dolores de cabeza constantes.
También, el ordenador debe colocarse frente a ti a la altura de los ojos. Es importante que no obstruya la vista, ya que esto puede provocar el síndrome del túnel carpiano, problemas en la columna y migrañas. Por supuesto, el escritorio y la silla perfectos son imprescindibles.
Si puedes, elige una mesa de oficina en función del tiempo que vayas a trabajar delante de ella: si vas a pasar muchas horas al día con el ordenador, asegúrate de que la altura sea lo suficientemente cómoda para escribir y de que tenga espacio para otras cosas, como las llamadas telefónicas o las notas; también es genial que tengan aberturas para que los cables no se enreden.
Con estas ideas podrás crear la oficina en casa que tanto deseas mejorando la productividad, eficiencia y eficacia con que trabajas.